ZENITH ANTIGUO, AÑO 1956, AUTOMÁTICO

La trayectoria de Zenith comenzó en 1865, en Le Locle, Suiza, cuando Georges Favre-Jacot, un joven relojero de 22 años, estableció la compañía con la meta de fabricar relojes de gran precisión mediante un sistema de producción totalmente integrado. Favre-Jacot revolucionó la industria al crear una manufactura donde todas las fases del ensamblaje se realizaban en el mismo lugar, un concepto innovador que permitió a Zenith garantizar altos estándares de calidad.

Innovación y excelencia en cronometría

Desde sus inicios, Zenith se distinguió por su precisión. En 1899, presentó su primer cronógrafo de bolsillo, lo que consolidó su reputación en la alta relojería. En 1911, la compañía adoptó el nombre Zenith, inspirado en el punto más alto del cielo, reflejando su deseo de alcanzar la máxima precisión. La marca obtuvo numerosos premios de cronometría, convirtiéndose en una de las firmas más prestigiosas en el desarrollo de movimientos mecánicos.

El Primero y la evolución de los cronógrafos automáticos

En 1969, Zenith revolucionó la relojería con el lanzamiento de El Primero, uno de los primeros movimientos de cronógrafo automático de la historia. Con una frecuencia de 36,000 alternancias por hora, permitía medir el tiempo con una precisión de hasta una décima de segundo, una innovación sin precedentes. Su importancia fue tal que incluso marcas como Rolex lo incorporaron en algunos de sus modelos.

Superando la crisis del cuarzo

Durante la crisis del cuarzo en los años 70, cuando los relojes electrónicos ganaron terreno, Zenith enfrentó tiempos difíciles. Sin embargo, a diferencia de muchas firmas que abandonaron la relojería mecánica, la compañía logró mantenerse a flote y en los años 80 retomó su esencia, apostando nuevamente por sus icónicos movimientos mecánicos. Su resurgimiento fue impulsado por el prestigio de El Primero, que siguió siendo altamente valorado en la alta relojería.

Zenith en la actualidad

Hoy en día, Zenith forma parte del grupo LVMH y sigue siendo reconocida por su compromiso con la precisión y la innovación. Su catálogo ha evolucionado con colecciones modernas como Defy y Pilot, pero siempre manteniendo el legado del icónico El Primero. La marca continúa siendo un referente mundial en la industria relojera, apreciada por su historia, excelencia y contribuciones a la relojería mecánica.

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