La historia de Rolex comenzó en 1905 en Londres, cuando el alemán Hans Wilsdorf, junto a su cuñado Alfred Davis, estableció una empresa dedicada a la distribución de relojes de pulsera. En una época en la que los relojes de bolsillo dominaban el mercado y los de pulsera eran considerados menos precisos, Wilsdorf tuvo una visión innovadora: diseñar relojes de pulsera que combinaran exactitud y elegancia. En 1908, la marca Rolex fue registrada oficialmente.
De Londres a Suiza en busca de precisión
El nombre «Rolex» fue elegido por Wilsdorf debido a su brevedad, facilidad de pronunciación en múltiples idiomas y su distintivo sonido al ser grabado en un reloj. En 1919, la compañía trasladó su sede a Ginebra, Suiza, epicentro de la relojería de alta gama, con el objetivo de aprovechar la excelencia y reputación de la industria suiza en la fabricación de relojes de precisión.
Innovaciones y avances tecnológicos
Desde sus inicios, Rolex se distinguió por introducir avances revolucionarios en el mundo de la relojería:
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En 1926, la firma presentó el Rolex Oyster, el primer reloj de pulsera hermético y resistente al agua, marcando un hito en durabilidad y fiabilidad.
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En 1931, Rolex revolucionó el sector con la invención del mecanismo Perpetual, el primer sistema de carga automática con rotor oscilante, que permitía que el reloj se mantuviera en funcionamiento con el simple movimiento de la muñeca.
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En 1953, la compañía lanzó el Rolex Submariner, el primer reloj de buceo con una resistencia al agua de hasta 100 metros, convirtiéndose en una referencia en relojes deportivos y de exploración.
Prestigio y reconocimiento internacional
Con el paso del tiempo, Rolex consolidó su imagen como un símbolo de lujo, precisión y resistencia. La marca se ha vinculado a aventureros, pilotos, atletas y celebridades, fortaleciendo su reputación como una de las casas relojeras más prestigiosas del mundo. Sus modelos han acompañado expediciones a los puntos más extremos del planeta, desde lo más profundo del océano hasta la cima del Monte Everest.
Hoy en día, Rolex sigue siendo una de las marcas de relojería más exclusivas y respetadas a nivel global, admirada tanto por coleccionistas como por amantes de la alta relojería, gracias a su inigualable calidad y legado histórico.
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